La Confederación de los Canónigos Regulares de San Agustín fue creada en 1959, en la ocasión del 900° aniversario del IV Sínodo Lateranense (1059) y aprobada por un breve apostólico del Santo Papa Juan XXIII “Caritatis unitas” del 4 de Mayo de 1959.

Cada Congregación permanece autónoma, pero lo que nos unifica es la Regla de San Agustín y el mismo carisma, vivido en los diferentes países del mundo entero. El objetivo de la Confederación es reforzar los vínculos entre las Congregaciones, el intercambio de experiencias y aumentar el amor fraterno entre los Hermanos.

La Confederación es presidida por un Abad Primado, electo por un solo mandato que dura seis años. El Abad Primado no tiene jurisdicción sobre las diversas Congregaciones: es un título honorífico otorgado a un Canónigo como signo representativo de nuestra unidad.